Expansión

       Sat Nam amigos. La cadena dorada sigue y sigue. Este maravilloso escrito es de una alumna del que fue mi alumno. Me ha dado permiso para publicarlo y así lo voy a hacer, porque creo que es muy bonito. Espèro que os guste.                                  

    HACÍA UN BELLO AMANECER

¿Cuántas veces nos hemos preguntado cual será el aspecto de Dios?. Para mi hoy ha llegado la respuesta y es esta.
Dios es el Sol cuando amanece, que sin el menor esfuerzo hace desaparecer las tinieblas y con sus enormes brazos, llega y te envuelve en un cálido y tierno abrazo.
Es el Mar,que con su vaivén, te mece, que te escucha y te consuela, que abre sus manos blancas y poco a poco se lleva tus penas.
Es el Aire que respiro, es el soplo de vida que me llena, que acaricia mis cabellos y deposita suavecito un beso en mi mejilla.
Es la Tierra en la que piso, la semilla que dará su fruto y me sirva de alimento, es el árbol que da sombra al cansado del camino.
Es la bella mariposa, también el feo cocodrilo, es el fiero lobo y el manso cabritillo.
Es la esencia de mi alma, también la de mi enemigo, que está dentro de nosotros y al que tan solo hay que descubrirlo.
Es el fiel amigo que siempre andamos buscando y que nunca llega, que hagas lo que hagas no te juzga y que siempre estará contigo.
Es la risa cuando ries, es la mano que le ofreces al perdido en el camino, es el hombro cuando lloras que te ofrece un gran amigo.

¿Qué si esto es Amor?
Mire a donde mire veo la belleza de mi Creador, y medito y me digo:
"Solo un Ser con un Amor Infinito,pudo crear tanta belleza y entregarsela a sus hijos".
Solo ya una cosa queridos compañeros de camino, dar todo el Amor que lleveís dentro, no os guardeís nada para vosotros, tened paciencía e id sembrando buenas semillas, que pronto recogereís los frutos y así poco a poco caminaremos por la vida por un jardín de rosas, a las que poco a poco entre todos, habremos logrado quitar las espinas, y esta vida volverá a ser el ansiado paraíso.

                                                                                                                                   Sacra_28/07/1998