Hermosa tarde

Me deleito contemplando el Sol del invierno, al atardecer, en las montañas, dejándolas nítidas y claras. Después de la lluvia de esta mañana, el aire ha quedado limpio y el Sol llega mejor, aliviando esta sensación de frío que todavía, nos acompañará durante meses.

Siento una emoción especial al observar en este momento lo poco que llegan sus rayos a nosotros ahora. Recuerdo como en los días de verano nos llena con su luz, con la  gran intensidad que tienen sus largas manos, que desde tanto tiempo alimentan esta tierra en la que todos nos apoyamos. Ahora parecen simular los últimos estertores de una hoguera.

Es un momento realmente especial. Observar como la naturaleza, la vida en sí misma tiene sus propios ciclos, al igual que nosotros.

 

Y parado en este paisaje, esperando que nos abandone ese Sol, siento una apertura interior, una gran sensación de Paz, un sentimiento precioso, como si estuviese contemplando algo grande, algo escondido en cada rincón de cada cosa, oculto pero hermoso. Un poder grande y compasivo que trabaja sin descanso, manteniendo el orden de las cosas, haciendo que digamos a cada instante “¡que casualidad!” o bien “¡uf, por los pelos, menos mal”, limpiando y manteniendo las instalaciones de esta “escuela de primaria.”

Y es cuando me siguen invadiendo multitud de sensaciones, tanto de protección como de agradecimiento. Supongo que es así como el hombre a través de las épocas ha sido consciente de Dios, de su divinidad, con esos “pequeños” y constantes milagros que cada día ocurren si tienes los sentidos sintonizados adecuadamente. A pesar de la reticencia de las distintas ciencias, el hombre sigue creyendo y sintiendo ese Dios. Dentro y fuera. A pesar de que nos digan que no, que lo hemos inventado, cuando sientes esa energía divina, da igual cuantas pruebas te presenten, tú lo sabes, lo sientes y te dejas guiar por él o por esas intuiciones.

 

Y no es nada nuevo, no estoy descubriendo algo de esta época, siempre ha estado ahí, sólo que ahora soy yo el que lo siente y por eso es especial.

 

 

 

 

3 comentarios

[Paqui - 27 de enero de 2009 - 10:47]

Muchas gracias por compartir con nosotros estas bonitas experiencias.
Un abrazo
Sat Nam
Paqui

[MJ - 27 de enero de 2009 - 10:43]

estoy totalmente de acuerdo contigo en toda tu reflexión.yo también tengo momentos únicos y especiales, casi siempre cuando estoy en contacto con la naturaleza, donde disfruto y me maravillo de todo lo que veo a mi alredor.Hace unos años murió un tio mio, era mayor y yo siempre mantuve una gran relaciòn con él, en su lecho de muerte estuve un ratito con él, y me dijo sin más que mirara fuera,de la ventana y viera que todo, todo estaba en orden, y que habia un gran director que lo mantenia todo en perfecto orden.Esas fueron sus ultimas palabras hacia mi, y apesar de que estaba ya practicamente inconsciente en sus palabras y en su mirada vi una gran paz y tranquilidad.Fue una persona muy religiosa y de gran espiritualidad, y ese fue su gran mensaje.sat nam de una alumna.

[Anónimo - 27 de enero de 2009 - 10:30]

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