Blogia
kundaliniongnamo

Todos somos espejo

Todos somos espejo

Hace no mucho, Deli, me envió este escrito de Deepak Chopra. Viene a decir lo que alguna vez ya he comentado en este blog de que tú eres yo y yo soy tú y que todos somos lo mismo, como las hojas de un árbol que se ven separadas, pero son el mismo ser o como las olas del mar, que parecen cosas independientes, pero en realidad son una manifestación de ese mar. El karma es una consecuencia de esto . Pienso que cada uno debería de darse cuenta de esto y empezar a experimentarlo por si mismo, pero siempre puede ayudar que alguien te indique el camino antes de recorrerlo tú.

Lo mejor es cómo lo expone y como te lleva a entender que el fin es la unión con el infinito. Me ha gustado mucho y lo voy a dejar aqui, para quien tenga un rato, porque es un poco largo, pero son palabras sabias y muy tranquilizadoras. Un abrazo a todos.

Por cierto, Devta nos ha nombrado en su blog, así que ya somos famosos. Aqui tenéis el enlace por si os apetece leer lo que dijo sobre el curso de numerología.

Sat Nam

 TODOS SOMOS ESPEJO, Deepak Chopra

Todos somos extensiones del campo universal de energía, distintos puntos
de vista de una única entidad. Esto implica ver todas las cosas del mundo,
a todas las personas del mundo, y darnos cuenta de que estamos mirando
otra versión de nosotros mismos. Tú y yo somos lo mismo. Todo es lo mismo.
Todos somos espejos de los demás y debemos aprender a vernos en el reflejo
de las demás personas. A esto se llama espejo de las relaciones. A través
del espejo de una relación, descubro mi yo no circunscrito. Por esta
razón, el desarrollo de las relaciones es la actividad más importante de
mi vida. Todo lo que veo a mi alrededor es una expresión de mí mismo.

Las relaciones son una herramienta para la evolución espiritual cuya meta
última es la unidad en la conciencia. Todos somos inevitablemente parte de
la misma conciencia universal, pero los verdaderos avances tienen lugar
cuando empezamos a reconocer esa conexión en nuestra vida cotidiana.

Las relaciones son una de las maneras más efectivas para alcanzar la
unidad en la conciencia, porque siempre estamos envueltos en relaciones.
Piensa en la red de relaciones que mantienes: padres, hijos, amigos,
compañeros de trabajo, relaciones amorosas. Todas son, en esencia,
experiencias espirituales. Cuando estás enamorado, romántica y
profundamente enamorado, tienes una sensación de intemporalidad. En ese
momento, estás en paz con la incertidumbre. Te sientes de maravilla, pero
vulnerable; sientes cercanía pero también desprotección. Estás
transformándote, cambiando, pero sin miedo. Te sientes maravillado. Ésa es
una experiencia espiritual.

A través del espejo de las relaciones, de cada una de ellas, descubrimos
estados prolongados de conciencia. Tanto aquellos a quienes amamos como
aquellos por quienes sentimos rechazo, son espejos de nosotros. ¿Hacia
quiénes nos sentimos atraídos? Hacia las personas que tienen
características similares a las nuestras, pero eso no es todo. Queremos
estar en su compañía porque subconscientemente sentimos que al hacerlo,
nosotros podemos manifestar más de esas características. Del mismo modo,
sentimos rechazo hacia las personas que nos reflejan las características
que negamos en nosotros. Si sientes una fuerte reacción negativa hacia
alguien, puedes estar seguro de que tú y esa persona tienen
características en común, características que no estás dispuesto a
aceptar. Si las aceptaras, no te molestarían.

Cuando reconocemos que podemos vernos en los demás, cada relación se
convierte en una herramienta para evolución de nuestra conciencia. Gracias
a esta evolución experimentamos estados extendidos de conciencia.

La próxima vez que te sientas atraído por alguien, pregúntate qué te
atrajo. ¿Su belleza, gracia, elegancia, autoridad, poder o inteligencia?
Cualquier cosa que haya sido, sé consciente de que esa característica
también florece en ti. Si prestas atención a esos sentimientos podrás
iniciar el proceso de convertirte en ti más plenamente.

Lo mismo se aplica a las personas hacia las que sientes rechazo. Al
adoptar más plenamente tu verdadero yo, debes comprender y aceptar tus
características menos atractivas. La naturaleza esencial del Universo es
la coexistencia de valores opuestos. No puedes ser valeroso si no tienes a
un cobarde en tu interior; no puedes ser generoso si no tienes a un
tacaño; no puedes ser virtuoso si no tienes la capacidad para actuar con
maldad.

Gastamos gran parte de nuestras vidas negando este lado oscuro y
terminamos proyectando esas características oscuras en quienes nos rodean.
¿Has conocido personas que atraigan sistemáticamente a su vida a los
sujetos equivocados? Normalmente, aquéllas no comprenden por qué les
sucede esto una y otra vez, año tras año. No es que atraigan esa
oscuridad; es que no están dispuestas a aprobarlas en sus propias vidas.
Un encuentro con una persona que no te agrada es una oportunidad para
aceptar la paradoja de la coexistencia de los opuestos; de descubrir una
nueva faceta de ti. Es otro paso a favor del desarrollo de tu ser
espiritual. Las personas más esclarecidas del mundo aceptan todo su
potencial de luz y oscuridad. Cuando estás con alguien que reconoce y
aprueba sus rasgos negativos, nunca te sientes juzgado. Esto sólo ocurre
cuando las personas ven el bien y el mal, lo correcto y lo incorrecto,
como características externas.
Cuando estamos dispuestos a aceptar los lados luminoso y oscuro de nuestro
ser, podemos empezar a curarnos y a curar nuestras relaciones. Todos somos
multidimensionales, omnidimensionales. Todo lo que existe en algún lugar
del mundo también existe en nosotros. Cuando aceptamos esos distintos
aspectos de nuestro ser, reconocemos nuestra conexión con la conciencia
universal y expandimos nuestra conciencia personal.

Las características que distinguimos más claramente en los demás están
presentes en nosotros. Cuando seamos capaces de ver en el espejo de las
relaciones, podremos empezar a ver nuestro ser completo. Para esto es
necesario estar en paz con nuestra ambigüedad, aceptar todos los aspectos
de nosotros. Necesitamos reconocer, en un nivel profundo, que tener
características negativas no significa que seamos imperfectos. Nadie tiene
exclusivamente características positivas. La presencia de características
negativas sólo significa que estamos completos; gracias a esa totalidad,
podemos acceder más fácilmente a nuestro ser universal, no circunscrito.

Una vez que puedas verte en los demás, será mucho más fácil establecer
contacto con ellos y, a través de esa conexión, descubrir la conciencia de
la unidad. Éste es el poder del espejo de las relaciones.


Deepak Chopra

1 comentario

Nani -

Hola, interesante texto. Una vez leí, no recuerdo donde, que uno se conoce a si mismo conociendo a los demás (yo no metería exclusivamente a los seres humanos, creo que se puede aprender de todo).

Creo que un buen modo de empezar a relacionarnos mejor es con la empatía, en lugar de ofuscarnos en que todo tiene que ser del modo que nosotros actuamos.

En fin, un saludo.