Blogia
kundaliniongnamo

2ª vivienda

2ª vivienda

En unos días se cumplirá el año 36 desde que estoy en este planeta con este cuerpo. Ya hace 8 años que empecé a impartir clase de Kundalini Yoga, 10 desde que empecé a recibirlas, 16 años siendo vegetariano y 18 practicando la meditación. La astrología empezó sin siquiera haber cumplido la mayoría de edad. Y todo esto si no cuento los rezos que practiqué desde los 8 años hasta los 28 sin faltar ni una sola noche. Ni una sola, ¿lo puedes creer? Casi no puedo creerlo yo, pero si, lo hice, por un juramento y soy de esas piezas raras que quedamos por ahí que cumplen lo que juran ante algo que consideran sagrado.

Lo que quiero decir es que necesitamos conectarnos a diario con lo que cada uno considere respetable, sagrado, elevado...  En realidad da un poco igual que sea una imagen de Guru Ram Das, la Virgen de la Esperanza, San Pascual Bailón, Buda Avalokitesvara o lo que sea que te inspire.

Necesitamos eso al menos para ser seres integrales y felices. Si lo quieres mejorar, deberías meditar alguna vez por semana y si quieres mejorar esto también, meditar cada día, comprometiéndote a hacer Sadhanas contigo mismo (es decir, meditar cada día por 40, 90, 120 o 1000 días, sin fallar ningún día)

Esto te da caracter, orden, "norte". Es como un pilar en tu vida, un sitio al que volver, un hogar al que cada vez que vas te acoge cálidamente. Va más allá de la fé, no es exactamente creer ciégamente, es cuidar de ese rincón. 

Esto se ve hoy día sustituido muchas veces por una 2ª vivienda, por un sitio a parte de donde vives para intentar sentir lo que describo y puede que en ocasiones sirva para esto, pero en realidad ese espacio sagrado tuyo no es que sea tu 2º hogar, sino que es el primero, al que vas cuando quieres y al que irás cuando tu tiempo de experiencia humana se acabe, para de allí ir a quien sabe donde...

Ojalá ya hayas encontrado ese sitio, está en tu interior, desde antes de nacer.

Mis mejores deseos y bendiciones a todos.

Sat Nam.

1 comentario

marcela -

Gracias por transmitir esta hermosa enseñanza